Un intercambiador de calor de placas industrial es un dispositivo de transferencia de calor indirecta que emplea una serie de placas metálicas corrugadas, dispuestas de forma paralela y separadas por juntas o empaquetaduras, para facilitar la transmisión térmica entre dos o más fluidos que circulan a través de canales alternos formados por dichas placas.
Su función técnica radica en optimizar la transferencia de energía térmica por conducción a través de las placas y por convección en los fluidos, maximizando el coeficiente global de transferencia de calor (U) para una superficie de intercambio dada. La corrugación de las placas induce un flujo turbulento a números de Reynolds relativamente bajos, lo que incrementa significativamente el coeficiente de película (h) de los fluidos y, por ende, la eficiencia del intercambio térmico.
En esencia, el intercambiador de placas funciona como un multiplicador de superficie, gracias a su estampado corrugado y patrón de las placas ofreciendo una alta eficiencia térmica y un diseño modular que facilita su expansión o modificación según los requerimientos del proceso.